Muchas son las virtudes artísticas que posee Adam Lambert, a su nada cuestionable (y extraordinaria) voz debemos sumarle la calidad de sus tres trabajos publicados hasta la fecha, pero no debemos pasar por alto ni dejar de valorar su personalidad camaleónica ni mucho menos su actractivo escénico, con cual capta nuestra atención desde el primer segundo. Todo esto (y algo más) da como resultado una única conclusión, Adam Lambert tiene madera de estrella, la misma con la que se forjaron los grandes mitos e íconos de la cultura pop-rock.
En estos tiempos de ídolos prefabricados, vale, eso no es algo nuevo, pero me temo que el término prefabricados se ha asentado tanto en la música actual que ya no solo ha perdido el encanto que pordrían tener algunos ídolos del pasado, es tan común que apenas deja lugar para aquellos que son genuinos poseedores de un gran talento y que injustamenten no deberían ser flor de un verano.
Este chico debería tener al mundo rendido a sus pies y ocupar los primeros puestos de las listas de éxitos de todo el mundo, pero no es así (no olvidemos que su segundo trabajo no se publicó en España), aunque cuenta con el favor y reconocimiento del público en general, siempre ha ocupado un segundo plano en la escena musical. Como concursante de American Idol quedó en un segundo puesto siendo triunfador un chico que estaba muy por dejabo del nivel de Adam, por aquel entonces se comento que su homosexualidad, tras hacerse publicas unas fotos besandose con su novio, fue lo que le impidió alzarse con el primer puesto.
Su tercer trabajo The Original High es el disco que debería asentarle definitivamente como una de las estrellas musicales del nuevo siglo, su poderio vocal esta patente (como no podía ser de otra manera) en cada una de las canciones, un trabajo repleto de talento, grandes temas, buena producción y muy buenas intenciones para ofrecernos algo disfrutable de principio a fin.
Tras el excelente single presentación Ghost Town el nuevo single Another Lonely Night es tan solo otra muestra más de que estamos ante uno de los mejores discos de este 2015.
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