El decimocuarto disco de Madonna se ha creado sin prisas, con pasión por la música y el placer de disfrutar creando, es un viaje sonoro donde cohesionan influencias musicales portuguesas, latina o africana, dotando a dicho trabajo de una riqueza sonora muy disfrutable que se desliga por completo del pop mainstream carente de aporte musical más allá de radiofórmulas efímeras, no sin contener cortes de tinte comercial como el reggaeton que no lo es, Medellín.
Con este trabajo ha vuelto la Madonna más transgresora en el campo musical, aquella que creaba y reinventaba el panorama musical al margen de modas y tendencias. En los últimos años se había acomodado en su trono de indestructible reina del pop, quizás también la exigimos demasiado por ser quién es, sin dejarla espacio para divertirse y disfrutar, ni mucho menos bajar el listón, con Madame X se ha alejado del camino que inició con Hard Candy para retomar la vena creativa que dieron como fruto discos tan imprescinbibles como Like A Prayer, Ray Of Light o Confessions On A Dance Floor, solo por poner un ejemplo.
Extrañamente, y aunque contiene joyas musicales como God Control, Killers Who Are Partying, Come Alive o Extreme Occident, lo mejor del disco, y lo que le convierte en un trabajo excepcional, no es una canción en concreto, es en sí el viaje sonoro que supone disfrutar del álbum en su conjunto, toda una travesía musical y emocional a través de este personaje, Madame X, el noveno disco de la cantante en alcanzar el primer puesto en la lista Billboard.
God Control se ha convertido por derecho propio en otro clásico dentro de la discografía de la reina del pop por varios motivos, el principal, obviamente, por la magistral composición y calidad de la misma, por otro lado por el calado de su mensaje, una declaración política sobre la venta de armas en Estados Unidos, God Control (control de Dios) es un juego de palabras con Gun control (control de armas), un viejo reclamo de un sector de la sociedad estadounidense que considera imperioso que se limite la venta de armas para poner un freno a los tiroteos masivos.
El videoclip (de obligado visionado) está a la altura de la canción, con más de ocho minutos de duración combina a una Madonna que canta y baila en un ambiente de fiesta en una discoteca con imágenes impactantes y estremecedoras de un sangriento tiroteo. dicha masacre es una alusión bastante clara al atentado que se produjo en la discoteca Pulse en Orlando, que dejó 49 muertos y 53 heridos en junio de 2016. El uso de un hecho tan sensible molestó a muchas personas.
Este es tu llamado de atención. La violencia armada afecta desproporcionadamente a los niños, los adolescentes y los marginados en nuestras comunidades. Hay que honrar a las víctimas y exigir CONTROL DE ARMAS. YA. Hazte voluntario, levántate, dona, extiende la mano. Despierta e insiste en que haya una legislación de armas segura y con sentido común. Vidas inocentes dependen de ello. (Madonna)
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