Quienes siempre ha innovado mayoritariamente en el mundo del pop han sido ellas, las féminas, tan competitivas entre ellas, convierten en ocasiones las lista de éxitos en un patio de vecinas. En su afán de destacar sobre el resto ponen en funcinamiento la maquinaria creativa (con o sin ayuda de un equipo de marketing) para tener un trozo del pastel del goloso mundo del pop. Reinas, princesas o simples aspirantes al trono, son la cara mas divertida del mundo de la música. La última en reclamar su parte del pastel es Miley Cyrus, y aunque no es precisamente una recién llegada, nadie se la tomaba en serio, hasta ahora, la chica ha llegado dispuesta a todo, incluso a poner a dieta a Lady Gaga, Britney Spears o Katy Perry dejandoles con una porción muy reducida del pastel, mientras ella se está pegando un atracón de dulce pop, con lo bien que esta funcionando su disco Bangerz ¿a quién le amarga un dulce provenga de donde provenga?.
Lo de esta chica siempre me resulto un despropósito y un sin sentido, solo apto para adolescentes generacionales, predestinada a quedar en un recuerdo del pasado cuando estos alcazarán la mayoría de edad. La chica creció, se mantuvo, pero no triunfó, al menos no como ella quería. Con un cambio de imagen radical, actitud renovada, sobre exposición de la lengua y sin bragas, Miley logró que se hablara de ella, a nosotros nos seguía horrorizando, aún mas si cabe que en su etapa repelente y We can´t stop nos resultaba terriblemente mala!
Algo cambió cuando estreno su segudo single Wrecking Ball, aunque no deja de ser una balada mas, Miley la ha sabido defender muy dignamente con una excelente interpretación, haciendo de este tema una pieza casi adictiva, y aunque continuamos horrorizados, esta melodia, casi en secreto, comenzó a conquistarnos.
Bangerz es su cuarto álbum de estudio, y el primero a tener en cuenta, por mucho que nos cueste creerlo Miley Cyrus no solo ha perdido la ropa y el pudor en la reinvención, también se ha dejado la piel para ofrecer un trabajo que como mínimo cumpla con las espectativas de estrella del pop emergente que se ha marcado, disfrutando al fin con lo que hace y siendo dueña de su propia carrera. Los críticos de Rolling Stone (internacional) le han elegido como uno de los mejores discos del año 2013 en la lista anual de la publicación, para sorpresa de muchos, entre otras cosas porque otras con mayores pretensiones artísticas se han quedado fuera de la lista.
Bangerz no solo es provocación, que de momento es en lo que se ha basado la cantante para meternos por los ojos su trabajo y captar el interés del público, dejando de lado ciertos prejuicios que podamos tener hacia Miley, descubriremos un trabajo que logra trasmitirnos un sentimiento desgarrador y melancólico sobre el amor en la mayoría de las canciones, pero también con una gran coherencia en la diversidad de estilos como hip-hop, dance, R&B e incluso country, un trabajo que sorprende gratamente por la calidad del mismo.
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